domingo, 30 de marzo de 2025

hablemos de insomnio

El insomnio o ese estado en el que se nos dificulta conciliar el sueño o permanecer dormidos y/o despertarnos con la sensación de no haber descansado lo suficiente, es algo que, si bien, no sucede a todas las personas, puede darse en aquellas con tendencia a tener un sueño liviano o bien, cuando no es posible dejar de lado las preocupaciones, situaciones o aconteceres cotidianos, al momento, del descanso.

En mi caso, siento que a veces se debe a posibles estados de ansiedad frente a ciertas incertidumbres de la vida que llevan a que el sistema parasimpático no logre activarse para el descanso, es decir la mente no logra desconectar. Y últimamente, empecé a relacionar esos estados también, con lo hormonal, porque hace un tiempo que estoy transitando la etapa de la perimenopausia.

Qué suelo hacer cuando aparecen esos estados? para disminuir el cortisol - hormona del estrés y liberar serotonina, encargada de regular la secreción de melatonina? 
En principio, poner en práctica algunas de las siguientes herramientas:
# técnicas respiratorias: la respiración profunda y consciente siempre va a hacer que bajemos revoluciones y nos brinde enseguida una sensación de calma.
# salir a hacer ejercicios físicos al aire libre: tales como caminar, correr, andar en bicicleta o bien, respirar naturaleza y exponernos al sol. 
# practicar yoga y/o alguna técnica de meditación.
# escribir en un cuaderno eso que puede estar preocupándonos: escribir lo que sentimos, es una herramienta terapeútica y a la vez muy liberadora.
# alimentarse de manera saludable, observando qué nos hace bien y qué no.
# recibir masajes o directamente, realizarnos un auto-masaje en los pies, dado que son el reflejo perfecto del cuerpo y masajearlos tiene un efecto relajante.
# practicar la auto-digitopresión(*) en zonas que ayuden a liberar tensiones y estimular el nervio vago (regulación parasimpática, relajación).
# tomar flores de bach o tinturas, especificas para tratar esos estados
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Frente a la variedad de herramientas o técnicas con las que uno puede volver a ese equilibrio y dormir bien, me lleva a reflexionar... ¿por qué algunos dejamos que el estrés o las ansiedades nos dominen de manera tal que una necesidad fisiológica como es dormir, en el que nuestro cuerpo descansa y nuestras células se regeneran, no se dé a veces de forma tan natural?
Y siempre suelo llegar a la misma conclusión: creo que pasa por aprender a estar atentos a éste momento - presente, a las emociones que puedan ir surgiendo y a observarnos porque, en ese observar, uno empieza a valorar las pequeñas cosas.
Algo que quizás suena muy cliché, pero cada vez estoy más convencida que lo simple y que menos - a veces, es más... puede ser una forma de agradecer lo que tenemos, de pensar en lo importante de la salud y de ahí para adelante, porque siempre van a ver situaciones en las que no podremos tener el control pero sabemos que, a su debido tiempo, las cosas se acomodan y ahí es cuando nos damos cuenta que de nada sirvió tener desvelos, no descansar bien y dejar que el cuerpo recupere fuerzas y energías, para estar más conscientes, ante la vida misma.

(*) más adelante, escribiré sobre auto-masajes basados en la digito-presión. 

jueves, 20 de marzo de 2025

el arte de darse cuenta

A menudo si olvidamos de observarnos bien, de estar conectados... suelen repetirse las maneras en que reaccionamos frente a situaciones que nos suceden en lo cotidiano y que, a veces, terminamos naturalizando.
Darse cuenta, observarnos... justo en ese preciso instante, donde nuestro cuerpo nos envía, de manera sutil, una señal que indica que algo no nos está sentando bien, es algo que debemos intentar no pasar por alto. 
Tal como decía J. Krishnamurti, el "darse cuenta" es simplemente ser consciente y observar los movimientos de la mente, sin interpretarlos.
 
A dónde voy con ésto? a contarles que hace unos días experimenté tal cansancio a nivel laboral debido a ciertas presiones y exigencias que demandan uno de mis trabajos que, llegué a sentir que empezaba a contracturarme y ponerme de un humor que no me gusta para nada, porque sé que sólo conduce a restar y sentir aún más cansancio. Es, entonces, en esos momentos en que logro darme cuenta y voy en busca de algunas de las herramientas o simples actividades que vengo hace tiempo poniendo en práctica y que, cuando logro hacerlo, doy fé que funcionan: como ser, salir afuera y respirar profundo, ver la luz del sol, estirar el cuerpo, para luego retomar con lo que estaba haciendo. O bien, al terminar de trabajar, salir a caminar para despejar y mover el cuerpo y/o tender el mat y realizar mi práctica de yoga, respirar y dejar que el cuerpo se mueva, la mente descanse y todo se convierta en una especie de meditación.

Parece un disco repetido eso que cuesta a veces poner en práctica herramientas que nos hacen bien, pero bueno, hay una realidad y es que somos seres humanos viviendo una experiencia y, tal como decía C.G.Jung "nadie se ilumina fantaseando figuras de luz, sino haciendo consciente su oscuridad". Y ahí es donde ese darse cuenta, el ser conscientes y observarnos, estar presentes en lo que hacemos, percibir cómo se hace y qué se necesita frente a los aconteceres de la vida misma, puede ser de gran utilidad en momentos o situaciones que nos demanden ciertas energías. 

En ese sentido, para que ese comenzar a darse cuenta, sea sencillo y simple, esté al alcance de la mano - algo que ya vengo mencionando en otros artículos, es conectar con el simple acto de respirar, pero no como lo hacemos habitualmente, sino de una manera consciente y simplemente, observarnos... porque se sabe que es y siempre será una herramienta de ayuda en situaciones que nos provoquen niveles de estrés, estados de ansiedad, de angustia, enojos, miedos, etc. y evitar así que el cuerpo termine expresándose en alguna dolencia física o enfermedad.
Empezar por este pequeño paso, de volver a respirar conscientemente, por más que suene quizás repetitivo, es lo mejor que podemos hacer... en todo momento, en toda circunstancia, porque estamos respirando y eso, es vida.


nervio vago: un hilo invisible a la calma

Anoche mientras tomaba un infusión de jengibre y reflexionando acerca de un libro que estoy leyendo y, sobre uno de los temas que destaca, l...